El gremio que conduce Amadeo Genta denuncia que a unos diez mil trabajadores no les pagaron horas extra y adicionales, después de que entró en vigencia un nuevo software. Desde el gobierno dicen que la medida es “una chicana política” y amenazan con descontar el día.
Por Eduardo Videla
Después de dos años de tregua, el gremio de los trabajadores municipales de la ciudad de Buenos Aires dispuso para hoy un paro contra el gobierno de Mauricio Macri. La medida de fuerza no es por motivos salariales –el gremio y el Ejecutivo acaban de iniciar la discusión paritaria– sino “problemas en la liquidación de sueldos, que afectan a más de 10 mil trabajadores”, aseguró a Página/12 el secretario gremial del Sutecba, Alejandro Amor. Los errores, precisó el dirigente, incluyen la omisión del pago de adicionales y horas extra, cuatrocientos trabajadores no cobraron sus haberes y hubo quien percibió 9000 pesos cuando su salario no supera los 2500. Desde el gobierno porteño no explicaron por qué se produjeron estos errores, pero el ministro de Hacienda, Néstor Grindetti, se manifestó “sorprendido por la actitud del gremio”. “Parece más una chicana política que un reclamo legal”, dijo a este diario.
“Nunca tuvimos problemas de liquidación de sueldos hasta que el gobierno de la ciudad cambió el sistema de liquidación de haberes e incorporó un nuevo programa”, dijo Alejandro Amor. Se refería al software Meta4, incorporado en diciembre último tras un proceso licitatorio que se inició en marzo del año pasado. El sistema, por ahora, se aplica sólo a los trabajadores del escalafón general, por lo que no incluye la liquidación de haberes de docentes ni de médicos.
“El problema afectó a unas 4500 enfermeras, que no cobraron los módulos, mediante los cuales les pagan las horas extra, que en muchos casos representa el 40 o el 50 por ciento del sueldo”, precisó el secretario gremial del Sutecba. “También afectó a mil técnicos del sistema de salud, que no percibieron las guardias, que en promedio son cuatro por mes, y no pagaron las tareas nocturnas a unos tres mil trabajadores que trabajan en la Dirección de Higiene Urbana, la Guardia de Auxilio, Defensa Civil”, agregó el dirigente. “Tampoco liquidaron los adicionales por tarea insalubre o riesgosa a personal que trabaja con rayos X, alto voltaje o con manipulación de citostáticos.”
El paro de hoy afectará a la administración de la ciudad (CGPs, registros civiles, Rentas), cementerios, el sector de enfermería de los hospitales y la recolección de residuos en la zona que gestiona la ciudad, entre otros servicios. El gobierno porteño anunció que “tal como sucedió con los docentes, les descontaremos el día a quienes no vengan a trabajar”. Claro que en ese caso, un fallo ordenó al Ejecutivo pagar a los maestros los días de paro. Lo mismo ocurrió con los trabajadores de la Contaduría, en una sentencia dictada la semana pasada (ver recuadro).
“Estamos muy sorprendidos con esta actitud que ha tomado Sutecba, que no es habitual de su parte”, evaluó el ministro de Hacienda, Néstor Grindetti, ante una consulta de Página/12. “Nos han llegado distintas versiones acerca del verdadero origen de esta medida de fuerza, que podría responder a algún interés político que excede el ámbito de la ciudad de Buenos Aires, lo cual esperamos no sea así”, agregó.
En Hacienda –el ministerio de donde depende la Dirección de Recursos Humanos, encargada de la liquidación de sueldos– no dieron explicaciones sobre las razones de los errores en la liquidación de sueldos. Se limitaron a afirmar que son “mucho menores a lo que dice el sindicato”, sin dar precisiones. Explicaron, sí, que el software Meta4 PeopleNet –de origen español– se aplica para la liquidación de haberes en las municipalidades de Córdoba y Mendoza, en el Banco Provincia, y en el exterior, en México DF y Curitiba, entre otras ciudades.
El gremio que conduce Amadeo Genta había iniciado su relación con la gestión macrista en forma tormentosa, cuando el jefe de gobierno dispuso, el 31 de diciembre de 2007, la cesantía de 2300 trabajadores contratados y la intervención de la obra social. La pulseada duró una semana: Macri y el veterano dirigente municipal firmaron la paz en las oficinas del empresario Nicolás Caputo.
Incluso, la semana pasada habían suscripto un acta acuerdo que incluye el inicio de la negociación salarial, el análisis caso por caso de un millar de despidos (según el gremio, hay casos de embarazadas o personas con licencia médica que fueron cesanteadas por ausentismo) y la incorporación de los 16.500 contratados, de los cuales alrededor de 4000 ingresarían a planta a partir de este mes.