sábado, 4 de junio de 2011

DIA MUNDIAL DEL AMBIENTE











La tierra no es una herencia de nuestros padres, sino un prèstamo de nuestros hijos" (proverbio hindù)


Desde 1973, el 5 de junio de cada año se celebra el Día Mundial del Ambiente que fue establecido por la Asamblea General de Naciones Unidas, en su Resolución XXVII del 15 de diciembre de 1972 con la que se dio inicio a la Conferencia de Estocolmo (Suecia), cuyo tema central fue el Ambiente.
Este año- como viene sucediendo desde entonces en que un paìs es el anfitriòn del evento -, le toca a la India y su tema dominante es "Bosques, la naturaleza a su servicio". Segùn esta consigna, en la pàgina del Programa de Naciones Unidas para el medio ambiente se lee: "Los bosques cubren una tercera parte de la superficie del planeta, realizando funciones vitales y servicios alrededor del mundo lo cual le da vida a nuestro planeta con posibilidades. De hecho 1.6 billones de personas depende de los bosques para su subsistencia. Ellos juegan un papel importante en nuestra batalla contra el cambio climático, liberando oxigeno a la atmósfera mientras que almacenan dióxido de carbono. Los bosques alimentan nuestros ríos y son esenciales para proporcionar el agua a casi el 50 % de nuestras grandes ciudades. Ellos crean y mantienen la fertilidad de la tierra y ayudan a regular el impacto devastador de las tormentas, diluvios e incendios. Espléndidos e inspiradores, los bosques son los ecosistemas con mayor diversidad biológica sobre la tierra y son hogar para más de la mitad de las especies terrestres de animales, plantas e insectos. Los bosques también proveen refugio, empleo, seguridad y relevancia cultural para las poblaciones dependientes de ellos.- Son los pulmones verdes de la tierra, vitales para la supervivencia de las personas en todas partes. Los siete billones que somos nosotros."
Pero otros temas han venido abordàndose desde hace casi 30 años: desiertos y desertificaciòn; cambio climàtico; deshielo de glaciares; agua, recurso vital del que carecen 2000 millones de personas; salvar los mares y ocèanos; pobreza y ambiente; lluvia àcida y residuos peligrosos; capa de ozono: pèrdida de tierra y degradaciòn de suelos, peligro de las bombitas incandescentes por su contaminaciòn; ciudades verdes, etc.
En todas ellas, la actividad humana constituye el mayor factor de peligro para el medio ambiente. Las principales causas: el cambio del hábitat, la sobreexplotación, la contaminación, la introducción de especies exóticas y el cambio climático que se mantienen constantes o incluso se están intensificando y todas son de origen antropogénico. La huella ecológica de la humanidad ha superado desde hace muchos años la capacidad biológica de la Tierra de absorberla. Otra hubiera sido la historia si hubièramos imitado a nuestros pueblos originarios que siempre se sintieron parte integrante de la naturaleza y por ende , respetuosos y guardianes de sus leyes, sin amenazarla ni agredirla. Debemos aprender de ellos, viviendo en la biodiversidad y creando conciencia solidaria a favor de los derechos de la naturaleza por encima de los nuestros.
Con 3 acciones simples y cotidianas, por ejemplo, podemos empezar a cuidar el ambiente en nuestro entorno pròximo: midiendo el consumo de agua, ahorrando energìa y separando los residuos. Tal vez, una profunda campaña pùblica aporte la informaciòn y sensibilidad de la que los humanos muchas veces demostramos carecer cuando nos creemos dueños de todo lo que nos rodea.